6) Los cinturones de seguridad fijos.
Los cinturones de seguridad automáticos fueron introducidos en los años 70, cuando Toyota se convirtió en el primer fabricante a equiparlas de serie en su Cressida. Sin embargo, las primeras cintas fueron fijadas de manera permanente a la puerta, por lo tanto el pasajero se veía obligado a deslizarse debajo de la correa para entrar en el coche y luego bloquearla con la puerta completamente cerrada. Esta primera cinta prototipo, qué extraño, no tuvo mucho éxito: se puede imaginar por qué.
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