Las estrellas de Hollywood a menudo nos parecen hermosas e inalcanzables: se piensa automáticamente que han sido siempre perfectas.
Pero como demuestran las fotos que van a ver, no todos nacieron posando para las fotos. Muchos de ellos tenían los dientes torcidos, acné, mejillas regordetas, el cabello desastroso, orejas prominentes… en fin. Muchos han mejorado con la edad (y con los tratamientos de belleza, hay que decirlo) otros fueron inmortalizados en fotos de la adolescencia que, como todo período de transición, no siempre es representativo del resultado final . En pocas palabras, ellos también eran «feos y nerds.»
Para que entendamos que ellos no son dioses del olimpo, sino simples mortales como nosotros, veamos como eran antes de ser conocidos como los íconos de belleza y elegancia que todos admiramos.