2) Evita café y alcohol.
Es inútil esconderlo: el cuerpo, para digerir el café y el alcohol requiere un mayor esfuerzo del hígado y los riñones, lo que aumenta el riesgo de obesidad y la aparición del diabetes. En cuanto al alcohol, la dosis diaria corresponde a 1 copa, mientras que el café es mejor biológico que industrial.
1) Come alimentos purificadores.
Intenta incluir en tu dieta esos alimentos que ayudan al cuerpo a reaccionar ante ataques externos: por ejemplo, cada mañana puedes beber un poco de zumo de limón exprimido diluido con agua tibia, o puedes hacerte una ensalada con remolacha , utiliza el ajo en tus recetas y sírvete del diente de león para las infusiones o como condimento en su segundo plato.
Habiendo acabado con los «preliminares», pasamos a explicarte en detalle como llevar a cabo esta dieta! (continua en la pagina 6)
